30/6/17


Mirar las cifras en taquilla de las películas es un ejercicio tan peligroso como dejar que los partidos políticos interpreten los resultados electorales. De repente resulta que ganar 872 millones de dólares  con "Batman v Superman" es un fracaso (no, no lo es. Otra cosa es que los productores quisieran ganar más) e incluso "Episodio VII", con su récord de recaudación en territorio americano, dejó mosqueado a más de un ejecutivo en Disney por ser "sólo" la tercera película más taquillera de todos los tiempos.

Es el problema de jugar con grandes presupuestos. Que si invierten más de 150 millones no sólo necesitas una burrada para recuperar la inversión (comencemos en 300, posiblemente más si le sumamos la inversión publicitaria) sino que, puesto que pusiste una cantidad tan alta de pasta, sientes que tus ganancias se tienen como mínimo que cuadriplicar. Gastar 200 kilos para, con el tiempo, ganar...digamos 70, parece casi una pérdida de tiempo (nuevamente no, no lo es, pero eso explícaselo a algunos productores en Hollywood).

Por eso yo tengo claro que, si algún día tuviera dinero como para ejercer de productor, huiría de los blockbusters y me refugiaría en un género mucho más vilipendiado pero, al mismo tiempo, infinitamente más rentable: el terror.


A ver, dejemos las cosas claras desde el principio. No, no todas las películas de terror hacen dinero. Sobre todo porque la gran mayoría recorren el circuito de festivales y ahí termina todo. Es muy difícil llegar a las salas de cine. Pero del selecto grupo que lo consigue, la proporción de películas que triunfan es infinitamente superior a la de cualquier otro género.

Esto es debido, principalmente, a dos motivos. El primero, que en una peli de acción, por ejemplo, una peli de "tamaño medio" no baja de los 50 millones de presupuesto (a no ser que te llames Robert Rodriguez, trabajes en tu rancho, con tu gran croma y tus cuatrocientos familiares multiplicándose en tareas varias). En el terror, una megaproducción como "The Conjuring 2", en la que sus responsables ya han tirado la casa por la ventana, vamos, un derroche brutal, la cosa les ha salido por 40.


El segundo motivo es que, en otros géneros, el boca-oreja hace mucho. Sí, la gente a veces tiene un gusto horrible, pero por lo general cuando una peli no mola demasiado, la taquilla se termina resintiendo de un modo u otro (aunque sea a una escala tan elevada como quedarse en los 872 millones de dólares de los que hablaba al principio, cuando otras seis cintas de superhéroes sí que pasaron del billón).

Sin embargo en el género del terror la critica ya puede machacar algo, decir que es espantoso, ser la película más aburrida, absurda, estúpida, elijan el adjetivo que más les guste, que la gente sigue pasando por taquilla. Por supuesto que la recaudación se resiente...pero menos. Tal vez porque sus fans son menos selectivos o tienen un gusto particular que hace que disfruten lo que a muchos nos parecen grandes truños. O quizás sea que los presupuestos son tan reducidos que hace falta "engañar" a un grupo más reducido de gente para que el negocio salga redondo.

Ah, perdón, tengo que añadir un tercer punto: el terror es uno de los pocos géneros en el que no necesitan estrellas ni nombres conocidos para que los aficionados se animen igualmente a ir a ver la peli.


Podría dejar el artículo aquí y quedarme tan pancho, pero creo que es interesante que demuestre con ejemplos lo que acabo de decir. Así que allá vamos, empezando por la ya citada y espléndida "The Conjuring 2", que, como si se tratara de la multiplicación de los panes y los peces, ha convertido los 40 millones que invirtieron sus productores en 246 millones (y aún sigue en cartelera). Y aún así es por ahora menos rentable que la primera entrega, que con la mitad de presupuesto llegó a los 318 millones.

(Más curioso es el caso de su spin off, "Annabelle", que siendo un subproducto como para arrancarse los ojos, costó 6 millones sólo...e hizo 256. ¿Recuerdan lo que dije sobre lo poco que le importa al público de estas cintas la calidad de lo que va a ver?)


Claro, me dirán. Son pelis de James Wan con Vera Farmiga y Patrick Wilson (que no son lo que yo llamaría superestrellas, pero vamos, son rostros conocidos). Tienen razón, así que vamos a ver qué tal les ha ido a otra películas, empezando por la saga "Paranormal Activity" que, ni dirigía nadie famoso, ni tenía a nadie famoso en su reparto (ni, añado yo, merecen mínimamente la pena. Particularmente me parecen un coñazo insoportable...salvo la tercera, que esa sí tenía su puntillo).

"Paranormal Activity". ¿Presupuesto? 15.000 dólares. ¿Recaudación? 193 millones. Tómense su tiempo para digerirlo. El día que me monte en el Delorean, llevaré la pasta en el bolsillo e insistiré en producir eso yo mismo.


La segunda parte, después del megaéxito de la primera, ya contó con 3 millones de presupuesto (que sigue siendo calderilla). Y aún así se llevó otros 177 millones, que es como que te toque la lotería dos veces seguidas. En la tercera aumentamos el dinero a 5 millones, que estamos que lo tiramos, y en compensación los beneficios son de 207 millones de dólares. En la cuarta repetimos presupuesto y la saga, que ya empieza a arrojar los primeros síntomas de agotamiento, se queda en 142 míseros millones (sí, es ironía). Y para la quinta ponemos 10 millones y, en el declive total y absoluto, se recaudan 78.

Vamos a detenernos a analizarlo friamente: la película que peor fue en taquilla logró ganar 8 veces el dinero invertido. Comprenderán que por mucho que sus responsables juren y perjuren que era la última de la saga, me cuesta creerles. A no ser que con lo recaudado con las 5 películas quieran comprarse un país pequeño (o no tan pequeño) y retirarse a disfrutar de los beneficios.


La saga "Saw" son demasiadas películas como para entrar en detalles. Pero sólo diré que "Saw VI", que es la que peor funcionó de todas, costó 11 millones y recordó 68. ¡¡Esa es la que peor lo hizo!! Y luego nos parece que la saga estaba agotada y que todas son iguales y bla bla bla. Pero hay gente que daba luz verde a los proyectos con una sonrisa en su rostro. Y supieron contenerse, que si fuera mi estudio ahora iríamos por "Saw XX". Porque incluso ganar únicamente el doble de lo invertido es un negocio brutalmente bueno.

Vale, volverán a decirme. Pero es que son dos casos aislados de sagas que dan en el clavo ("Paranormal Activity" incluso se pasó años en un cajón, y su director no ha vuelto a hacer algo tan exitoso). Y yo les pregunto: ¿están seguros de eso?


Vamos a ver algunas películas recientes, no especialmente famosas y no especialmente buenas, ¿les parece? "Ouija". ¿Les suena? A algunos sí, a muchos no. Ya les digo yo que es una peli del montón. Pero esta "peli del montón" cogió los 5 millones que costó hacerla y llegó hasta los 103. Otro ejemplo: "La horca", mala como ella sola. Presupuesto de 100.000 dólares. Recaudación: 42 millones. ("The boy": 10/64; "Oculus": 5/44; "La mujer de negro 2", que no se sabe cuánto costó pero ya les digo yo que no fue mucho: 48 millones de recaudación; "The Forest": 10/37; "The lazarus effect": 3/38...y podríamos seguir así todo el día)

Pero es que hasta una película como "Eliminado", que son chavales delante de una pantalla de ordenador, hablando por skype (y que costó 1 millón, de los cuales por necesidad 950.000 dólares tuvieron que destinarse a coca para los productores, porque si no las cuentas no me cuadran, ya que eso lo podría rodar hasta con mi móvil, que ya está para el arrastre) consiguió...¡¡64 millones!!


Bonus track, retomando lo que decía sobre el tema del casting. Lo que son las cosas. Una saga como "The Purge", que ahí sí tiene rostros famosos (Ethan Hawke y Lena Headey) costó 3 millones e hizo 89. Para la segunda parte, los productores se dijeron "¿y si la hacemos con actores de segunda categoría - con todo mis respetos para ellos - como Frank Grillo y no nos pasamos de los 9 millones? Pues lo que pasó es que superó a la primera y llegó a los 111 millones. 

Y ya que hablamos de Ethan Hawke, el actor también estuvo en "Sinister" (3 millones / 77) pero en la segunda parte fue sustituido como protagonista por el genial pero menos mediático James Ransome. ¿El resultado? Pues un poco peor, pero aún así yo caminaría descalzo sobre brasas ardiendo para firmarlo: 10 millones de coste, 52 de beneficios. ¿Ven como no hace falta invertir en star system?


¿Significa todo lo que he dicho que hacer una película de terror es un negocio seguro? No, ni mucho menos. Podría hacer un artículo igual de extenso con cintas con recaudaciones paupérrimas. Pero, en la mayoría de los casos, como digo, es porque no lograron llegar a la pantalla grande. 

Lo que está claro es que, a pesar de que a los críticos no les gustan esta clase de cintas, a pesar de ser consideradas películas de serie B, a pesar de todo lo que ustedes quieran, es el mejor negocio inversión/posibilidad de beneficio que existe en Hollywood. Porque 5 millones de dólares no supone un gran riesgo, y hay una alta posibilidad de que de repente te veas nadando en la abundancia. Y "tercera película más taquillera" u "872 millones" suena mejor, sí, pero cuando has podido dormir por las noches porque tampoco es que te vayas a arruinar si pierdes la pasta que has soltado, una cifra de digamos 70 millones no es ya que sepa a gloria, es que te convierte en el mayor triunfador del mundo.