19/10/15


Ya es casualidad que este año me haya aficionado sólo a dos animes (por falta de tiempo, no de ganas; adoro el género) y que justamente cuenten en este 2015 con adaptación a la gran pantalla en imagen real. Y para rizar el rizo Sitges ha tenido a bien programar ambas, con lo que imaginen mi alegría. 

Uno de ellos es "Assasination Classroom", de la que ya les hablé (resumen rápido; la película es una delicia) y el otro es este "Parasyte", que, al estilo del "Ataque de los titanes", ha contado con dos cintas que forman un díptico que narra la historia completa (no sé si en este caso es Japón quien ha copiado a Hollywood y la fórmula iniciada por Harry Potter, pero cada vez es más habitual eso de tener que pasar dos veces por taquilla si quieres enterarte de cómo acaba la cosa).


Afortunadamente Sitges, aparte de proyectarlas por separado, tuvo a bien realizar uno de esos minimaratones que tanto se agradecen juntando ambas partes, una idea genial ya que creo que "Parasyte" se disfruta mucho más viéndolo de una sentada. Sobre todo porque, a diferencia de ejemplos previos (y de nuevo me viene a la cabeza la peli de los Titanes), aquí la segunda parte no supone un cambio de estilo y/o giro argumental, sino que tiene el mismo aspecto, cadencia e intenciones que la primera. Es decir, básicamente es una única película cortada en dos.

A la tierra llegan unos extraños seres, unos parásitos en forma de gusanos, que se introducen en el interior de las personas, matándolos y tomando el control de sus cuerpos. Uno de ellos intenta hacer lo propio con Shinichi, un joven estudiante algo cobardica, pero por una serie de circunstancias es incapaz de llegar hasta su cerebro, pudiendo tomar únicamente el control de su mano derecha. Esto dará lugar a una curiosa relación de dependencia primero y amistad después entre Shinichi y el extraterrestre, Migi ("mano derecha", literalmente, en japonés).


Ambos aprenderán del otro. Migi, incapaz de entender conceptos como el altruismo o el amor, poco a poco irá "humanizándose", mientras que Shinichi irá convirtiéndose gradualmente en un héroe, la única persona que sabe realmente lo que está sucediendo con los parásitos y que intentará acabar con ellos (a eso ayuda bastante que el extraterrestre pueda cambiar de forma y convertir el brazo derecho del chico en toda clase de armas).

"Parasyte" está basado en un manga algo antiguo (y que confieso que no he leído) que, por alguna razón, se ha puesto de moda en los últimos tiempos, primero con una serie de 24 capítulos y luego con estas dos películas, que condensan en algo menos de cuatro horas los 900 minutos que duraba el anime. Y lo cierto es que sus responsables han hecho un excelente trabajo, ya que, salvo pequeños detalles, son muy fieles a la historia original, que siguen punto por punto.


Obviamente hay cosas que han desaparecido, pero son principalmente aquellas que, si bien podían tener su gracia, siendo sinceros no aportaban nada realmente destacado a la trama (como pasa con el segundo humano/parásito, que tiene alojado al extraterrestre en su garganta). Ni siquiera la ausencia del padre de Shinichi, que sí forma parte del anime, tiene ningún tipo de repercursión ni crea el más mínimo problema a la hora de que la historia avance.

En cuanto a las pelis en sí, sólo puedo decirme que me lo he pasado en grande. Son muy entretenidas, están muy bien hechas y cuentan con la virtud de narrar una historia interesante y llena de acción, pero en la que también hay lugar para la reflexión sobre lo que significa ser humano. Es decir, nos hayamos ante un blockbuster en toda regla en la que los personajes no son simples caricaturas unidimensionales, sino que tienen su buena dosis de profundidad e incluso evolucionan a lo largo de la historia.


Historia que fluye de un modo natural y en el que, por una vez, y sin que sirva de precedente, agradezco que dividieran en dos, ya que intentar recortarla para hacer una única cinta hubiera sido perjudicial porque se habrían perdido multitud de importantes matices, que son los que finalmente la convierten en un producto tan interesante.

Sé que todos (yo el primero) tenemos la vista puesta en los blockbusters que nos llegan desde Hollywood. Pero a veces deberíamos fijarnos más en lo que se está haciendo en Japón, ya que cada vez están perfeccionando más ese concepto de "película palomitera" a la que le añaden un ingrediente emocional extra que muchas veces se echa en falta en las pelis americanas.


Si tienes dudas sobre si ver o no la película, mi consejo es que visiones el primer episodio del anime. En 20 minutos sabrás si te interesa o no la historia. Y si te gusta lo que ves, entonces "Parasyte", el live action, te flipará. Eso te lo aseguro.