El año 2016, cinematográficamente hablando, supone la llegada de el Doctor Extraño al universo Marvel, siendo la segunda película que veremos de la Fase 3 tras "Capitán América: Civil War", y nada menos que con el rostro de Benedict Cumberbatch. Era de esperar que Marvel se adelantara a dicho estreno preparando el terreno y otorgándole al personaje una serie en solitario dentro de su All New All Different. Aunque también es de prever que esta serie se relanzará casualmente con el estreno de la película. Y si no, al tiempo.
El tándem de autores que se anunció para contarnos las
aventuras del hechicero supremo no dejó indiferente a nadie: nada menos que
Jason Aaron a los guiones y Chris Bachalo a los lápices. Aaron es de esos
escritores que si le asignan la nueva colección de Pequeño Pony se acabará
convirtiendo en una serie referencia (os obligo, nada de recomendar, OBLIGO a
leer su “Scalped”) y Bachalo es de esos autores que lo mismo se marca una
genialidad como es “La Hora Bruja” o “Steampunk” como que te dibuja un comic
que no sabes si lo estás leyendo boca abajo, como es el caso que nos ocupa.
Seamos francos, los hechos que se narran en este primer
número son cojonudos. El cómo se cuentan, no. Nada más tenéis que ver que
Bachalo utiliza la formula de la doble-splash en las primeras 8 páginas del
cómic, sin que se considere necesario para ello, y ya una vez que se dedica a
dibujar el comic “de verdad” la calidad del mismo dista mucho de obras
recientes para La Casa de las Ideas.
Ese día tocaba manejar el azul... |
Además, no sabemos si por cobrar un sueldo adicional o
por capricho, los colores han recaído en sus manos, dejando muchas de las páginas
prácticamente en una sola gama cromática, lo que afea aún más el resultado final
(este comic con LIQUID! manejando la paleta sería otro cantar). Menos los osos
de peluche gigantes del principio, que para eso tiraremos de Photoshop.
Hablando del cómic en sí, nos encontramos con un Doc en las
primeras páginas del número batallando con lo que más adelante se catalogarán
como “Comealmas", mientras nos narra lo dura que se la pone su trabajo, para
mostrarnos en breve que toda esa acción se da en el plano astral mientras medio
exorciza a un niño. Y donde la magia no llegue, siempre viene bien una buena
espada o un buen hacha, que cojones.
Todos tenemos un parasito interdimensional. Hazte con todos!!!! |
Una vez en la calle, y tras mostrarnos cómo se ve el mundo a través de los ojos de un hechicero supremo (en una doble splash de nuevo, pero con toques de coloreable) acabaremos reuniéndonos en el bar de los hechiceros o magos de la casa, en la que Doc acabará compartiendo las desventuras de aquella mañana con los compañeros del gremio y mostrándoles la inquietud de haberse encontrado con las criaturas antes citadas, para acabar cerrando el cómic con una nueva "consulta médica" que mostrará a Doc algo jamás visto hasta ahora y que supondrá todo un cliffhanger final que nos dejará con ganas de más.
Doctor, ¿algún remedio para esto? |
Insisto, ideas de Aaron que maravillan y con unos diálogos cojonudos,
pero con una parte gráfica que no acompaña. Y me jode, ya que Bachalo puede dar
mucho más de sí. El hecho de que seguramente una vez se acerque la película se
vuelva a relanzar el comic me da esperanzas a que Marvel dé con la formula para poder captar nuevos lectores, ya que esta serie, si continuas con ella,
será únicamente por los guiones de Jason Aaron, nunca por la parte gráfica.
Menos mal que siempre nos quedará la maravillosa portada
variante de Skottie Young:
Doctor Extraño no tengo ni la más mínima puñetera idea de cuándo se publicará, pero todo indica que será una vez cerrado el primer arco argumental y bajo el formato 100% Marvel de Panini. Y se me apuráis, para el próximo Saló del Comic de Barcelona.