6/9/15



En ocasiones hay personajes que están de moda o que por algún motivo extraño las editoriales propietarias de los derechos quieren que molen. Ahí tenemos a Marvel publicando sus sopocientas series de "Inhumanos" y en DC tienen a "Deathstroke", un personaje que lleva pululando décadas y que en los últimos años lo hemos tenido en un buen montón de tebeos, en los videojuegos de la serie Arkham, en una película de animación y especialmente en la serie de "Arrow".


Ahora DC, en su penúltima tanda de títulos (antes del fallido DC You) se ha sacado de la manga una nueva serie regular para Slade Wilson, Deathstroke – el Terminator, como le llamaban en los años 80  - y aunque está dentro de su continuidad, podemos afirmar que puede leerse totalmente al margen porque es un relanzamiento en toda regla del personaje, dándole una nueva misión, trasfondo y personajes secundarios.

El elegido para esta tarea (que está vendiendo bastante bien) es Tony S. Daniel dibujando y Tony S. Daniel escribiendo. Sí, amigos, el tipo que firmaba como Antonio Daniel en los X-Force de Fabian Nicieza en los 90, ahora considera que es autor completo. Aunque claro, la culpa de esto la tiene DC, que ya le dejó encargarse  a él solito de todo el evento “Batalla por la Capucha” de cuando murió Bruce Wayne. Pues tengo que reconocer que ha aprendido a escribir lo suficiente para que este tebeo sea francamente entretenido y coherente.


En este puñado de episodios, Deathstroke es víctima de engaños y trampas, lo que para un mercenario como él con un portentoso factor curativo y capaz de usar el 90 % de su capacidad cerebral es toda una molestia. Su vida se complicará sobremanera cuando descubra que le han borrado una semana de recuerdos recientes y tenga que juntar todas las piezas del puzzle invisible en que han convertido su vida.  A esto hay que añadirle la presencia del villano Odiseo con el que comparte un estrecho vínculo y la aparición constante de sus hijos Destructora y Jericó.

Como he comentado, Daniel construye bastante bien toda la historia,  la trama es dinámica y el tebeo se lee con facilidad. Quizás repite demasiado algunas expresiones o frases dichas por el protagonista y, como él mismo se dibuja, se prepara muchas escenas de lucha innecesarias pero que son francamente espectaculares. Pero eso sí, le salen mucho mejor las peleas uno contra uno, donde planifica mejor la página y las coreografías, que las batallas más “multitudinarias”, donde todo es un caos que no hay dios que entienda.


Por aquello de las ventas y de los personajes que están de moda, habrá trama que lleve al personaje a Gotham y se encuentre, además de con quien ya os imagináis, con Harley Quinn, que siempre es agradable de leer si la tratan con respeto y no como a una simple psicótica perturbada (este no es uno de esos casos).

Buen tebeo de acción y aventuras, de esos que por encima de contar una historia lo que buscan es servir de fuente de evasión. Y eso lo consigue bastante bien.