1/7/15


Bienvenidos a "Empanada de Mcguffin", la sección...columna...lo que sea semanal en la que El Dani divagará...desbarrará...hablará sobre todo lo que se le ocurra relacionado con el séptimo arte. Y para ser consecuente, se estrena hablando de una serie de televisión.

En este artículo me gustaría plantear un ejemplo de cómo la realidad, en ocasiones, imita a la ficción. Por supuesto, algunos de los paralelismos son bastante endebles, pero quiero pensar que la relación entre calidad de la propuesta y la gracia que puede llegar a hacer, compensa. La teoría es que Alberto Garzón es Jon Snow.

Por partes. 

Jon Snow milita en una organización con escasos miembros, cuyos objetivos, en principio, gozan de la simpatía de gran parte de la población. Sobre todo, el objetivo último: intentar frenar el avance de un ejército azulado que, si consigue derribar la defensa que plantea la facción de nuestro protagonista, sembrará el caos en todo el territorio.

Joder, qué tropa
En su entorno, existe otra facción: El pueblo libre. Una amalgama de distintas tribus como Thennitas, gigantes, etc. que no tienen gran cosa en común, pero en el momento histórico en el que se desarrollan los sucesos objeto de nuestra teoría, son unidos por Mance Rayder. Un líder que los amalgama para luchar por un objetivo común.

A pesar de la oposición de sus compañeros del muro, Jon Snow trata de dialogar con Mance Rayder, para crear un frente común con el que puedan enfrentarse juntos al ejército azulado. Mance, que pese a que hace tiempo fue un hermano juramentado de la guardia de la noche, rehusa la alianza con sus antiguos compañeros.

Jon Snow decide por su cuenta y riesgo colaborar con el pueblo libre, permitiéndoles el paso a través del muro, lo que, según los miembros de la guardia de la noche, significará el caos, ya que no son gente de fiar por no compartir sus principios.


Al conocer el trato entre Jon Snow y el pueblo libre, sus propios compañeros, considerando que les ha traicionado a ellos y todo lo que su labor representa, le apuñalan, sin quedar del todo claro si Jon está vivo o muerto.

Ah, y el paralelismo: los dos son jóvenes y tienen barbita.