4/5/17


Ayer lunes en el CICCA se proyectó la primera tanda (de cuatro) de cortometrajes que compiten por alzarse con el gran premio en Animayo 2017.

En total fueron 8 piezas agrupadas en lo que podría denominarse "temática animal", salvo uno de ellos, "Segundito", que es un divertido cortometraje de muy escasa duración, básicamente un gag, y del que es imposible decir nada sin entrar en el terreno del spoiler y arruinar la sorpresa.

El cine es algo tan subjetivo, tan particular, que les ruego, como siempre hago, que no se dejen guiar ciegamente por mi criterio. Yo sólo puedo dar mi opinión personal. Y en ese sentido debo decir que ninguno de los cortometrajes me pareció una obra maestra, aunque, eso sí, el nivel me pareció de notable alto, sin que ninguna de las piezas chirriara (es decir, hasta las más flojas eran, como mínimo, interesantes).


Posiblemente a nivel visual el mejor trabajo de todos es "Citipati", que cuenta la historia de un dinosaurio que se enfrenta a una impresionante lluvia de meteoritos. Flojea en guión (en realidad la trama es más bien una excusa), pero la animación es sencillamente espectacular. No me extraña que el corto se haya paseado por festivales de medio mundo.


En el otro extremo,"The wrong end of the stick" tiene el guión más interesante, en una historia que no deja indiferente. En este caso asistimos al drama de un hombre que en realidad quiere ser un perro (con todo lo que ello supone...incluido el aspecto sexual, tema en el que se abunda bastante). A pesar de un final un tanto deslucido, me pareció de lo más interesante.

Otro cortometraje en esa línea, es decir, la de plantear preguntas al espectador es "Bearable", que trata la historia de un hombre que tiene como mascota...a un oso. Aunque las cosas no son lo que parecen y tiene un final de esos que te obligan a replantearte todo lo que has visto.


Hubo dos cortometrajes con protagonistas gatunos. El primero de ellos, el simpático "kitten witch", que mezcla animación con persona real y que narra la historia de una pequeña gatita que tiene que completar un hechizo para convertirse en "familiar" de una bruja.


El segundo es "Pétalos", que juega mucho con el estilo de animación manga y que cuenta una historia a priori frívola (una conejita persigue un carro con una flor, que se la ha escapado de las manos) y que termina teniendo "mensaje", en un final quizás demasiado ñoño que le resta un poco de fuerza al conjunto (al menos, insisto, para mi gusto).


Por su parte "El criptozoólogo" es un entretenido cortometraje sobre un investigador que viaja a una tierra remota buscando una nueva especie animal (un tipo de "minielefante con alas") y que, obsesionado con su objetivo, no se da cuenta de que en la isla viven toda clase de criaturas mitológicas. Tiene su gracia, pero tampoco mata.


El último corto de esta primera tanda es "Accidents, blinders and calamities", en las que una zarigüeya le cuenta a sus crías lo peligrosos que son los humanos, mientras narra, en una especie de poema, todos los pequeños bichos e insectos que mueren cada día a sus manos. Es ingenioso, pero a la hora de la verdad se olvida fácilmente.

Esto es lo que dio de sí el día. Esta misma noche, a partir de las 20:30 horas, hay una nueva cita con más pequeñas grandes piezas en Animayo 2017.