14/11/15


Tal y como os comentábamos en la presentación de TodoMarvel, desde Todoocio3d vamos a reseñar cada saga que haya sido homenajeada, revisada o ampliada en “Secret Wars”, y creo que “Civil War”, publicada en verano de 2006, es un buen punto de partida.

Con este crossover volvían a la Casa de las Ideas los cruces gigantes que implicaban a todo su universo cohesionado. Un año antes ya habían publicado “Dinastía de M”, pero ese cruce no fue tan importante como éste por dos razones: la primera, que afectaba especialmente a los mutantes; la segunda, que todo sucedía en una dimensión alternativa que tuvo secuelas en la Tierra 616, pero los acontecimientos principales no se desarrollaron en ésta.

El incidente que lo comenzó todo
“Civil War” fue en su momento el cruce más importante y más polémico que se había publicado en Marvel y surgía de una premisa muy importante: todo partía de una masacre que se desarrolló en Stanford (pueblo natal de Jeph Loeb, por cierto), consecuencia de un ataque llevado a cabo por Los Nuevos Guerreros, que andaban grabando un reality show donde daban caza a supervillanos. Pues bien, uno de estos villanos era Nitro – el responsable del cáncer del Capitán Marvel – que con su poder de hacerse explotar a sí mismo acabó con los New Warriors y con 600 civiles – muchos de ellos niños – muertos.

Todo esto desarrollado en cinco páginas solamente. A partir de este momento los acontecimientos se aceleraron cosa mala. Algunos héroes como Reed Richards, Hank Pym y especialmente Tony Stark promovieron junto a Shield el acta de registro de superhéroes, por lo que todo justiciero, héroe, mutante o vigilante debería registrarse, revelar su identidad y trabajar para la agencia de espionaje dirigida en ese momento por Maria Hill. Perderían su libertad, pero se convertirían en “legales”  y en funcionarios del gobierno. Por supuesto héroes como el Capitán América, Daredevil, Capa y Puñal, Hércules, Caballero Luna y demás se opondrían por completo a este régimen totalitario y fascista, creando dos interesantes bandos, que inevitablemente llegaron a las manos.

Todos los cómics lucieron este diseño de portada
Por primera vez en tiempos modernos, los tebeos de Marvel se politizaban (lejos quedaron los cómics del Capitán América y el Imperio Secreto) y en los siete números que duraba “Civil War” el ritmo fue vertiginoso. Mark Millar se las apañó para contar muchas cosas, aunque es cierto que leer sólo la serie principal dejaba cojos numerosos argumentos, como el nuevo programa Thunderbolt, algunas cuestiones de Spider-Man o la polémica prisión 42 para superhéroes ubicada en uno de los lugares más emblemáticos del Universo Marvel. No obstante si sólo podéis leer la historia principal, os enteraréis de lo imprescindible.

Una de las pocas bajas de la saga que, por cierto, sigue muerto

Ahora bien, y poniéndonos serios, ¿merece la pena “Civil War”? Desde luego que sí. Yo me la he releído ahora para preparar estos posts y la he disfrutado más incluso que en su momento. Mark Millar escribió muy bien a los personajes principales: el totalitario Iron Man, el libertario Capitán América y luego estaría Spider-Man que en el número dos de la historia develaría al mundo su identidad secreta en apoyo a Tony Stark. Es cierto que esto no es algo que cuadre mucho con el personaje, de hecho el Capi le echó en cara que ahora el Doctor Octopus sabría el código postal de su Tía May y de Mary Jane, pero se puede interpretar que Stark le había lavado el coco a Peter. No obstante, el cambio de bando fue también uno de los mejores momentos.

Hablábamos del guion de Millar,  que estuvo bastante más acertado que en sus trabajos recientes y se las apañó para que buena parte del Universo Marvel cupiese en la historia. Así teníamos a Namor, a Pantera Negra, una más que interesante charla entre Stark y Frost sobre los mutantes y su papel en el conflicto (en esa época ya estaban diezmados y vigilados por los centinelas de O.N.E).

Pero lo que fue un completo zurullo fue el desenlace. Vale que era lógico y “realista” que ganase el bando de Iron Man (la guerra siempre la gana quien tiene las armas más grandes) pero ese final con el Capi completamente sumido en una ira homicida y el momento en que le paran un contingente de bomberos, policías y sanitarios es para echar la pota.

¿De qué lado estás? fue el lema de la saga
Es cierto que realmente éste no era el final auténtico, pues el desenlace se llevó a cabo en las páginas del Capitán América, con la supuesta muerte de éste. Curiosamente este hecho y el mencionado anteriormente desenmascaramiento de Spider-Man fueron dos de los primeros acontecimientos destripados en todos los medios de comunicación generalistas. El del Capi incluso salió en la televisión, algo que no sucedía desde la muerte de Superman.

El encargado de dibujar esta epopeya fue Steve McNiven, encumbrado a dibujante estrella tras este título y que desde entonces se ha dedicado más bien a tocarse los huevos y dibujar alguna etapa corta o saga concreta. Su trazo fue espectacular y muy adecuado para las escenas de batalla, pero para los momentos de sosiego se mostraba bastante más limitado.

Uno de los momentazos de Civil War, destripado en todas partes
“Civil War” dejó paso a lo que se denominó “La Iniciativa”, una etapa del Universo Marvel donde cada estado de Norteamérica contó con su propio superequipo, y Tony Stark pasó a ser el jefazo de Shield. Así pues si el cierre de “Civil War” no fue la bomba, los frutos que sembró sí merecieron la pena.

Actualmente podéis conseguir la saga de “Civil War” recopilada en un volumen de Marvel Deluxe. Más detalles aquí.