22/11/15



La película más cara del cine indio, así es como se presentaba esta película. Unos 40 millones de dólares a repartir entre todo el equipo infográfico y con razón, que hay mucha teca para rellenar los 135 minutos que dura esta epopeya,. Encima leo por internet que no han tenido suficiente con eso, que además han conseguido obtener un récord Guiness gracias al póster más grande de la historia del cine, 4.800 metros cuadrados a color. 

Está dirigida por un señor llamado S.S.Rajamouli, que también firma el guión a partir de una historia de Vijayendra Prasad. ¿Y es una película de Bollywood? Pues parece que no, está filmada en telugu, por lo que pertenece al llamado “Telugu cinema”, una parte de la industria cinematográfica india que es producida al sur del país. Pero bueno, por nuestra parte tanto monta y monta tanto, porque en la primera parte de la película se marca unas escenas musicales (asociadas al cine de Bollywood) de aquellas que tardas en olvidar. Épica por todas partes. Que empiece a sonar música india en vuestra cabeza mientras leáis el siguiente párrafo.

Si soy el guerrero más fuerte, soy un super guerrero y si me enamoro, me enamoro a lo loco. Soy tan macho, tanto, que le doy la vuelta a ese concepto. Soy tan macho, que enseñaré a la mujer que amo (una guerrera de toma y daca) a sacar su feminidad a base de poéticos bailes. De soldado a princesa en una canción. Ved la película y entenderéis todo esto. Ya podéis darle al stop a vuestra jukebox mental.


Tras esta primera parte épica y romántica a partes iguales, llega la segunda. Y una de las cosas que más nos fascinó: uno de los flashback más largos que recuerdo, que nos narra una mega batalla ( a lo Señor de los Anillos (sí, malditas comparaciones, ¿eh? ) que cuando llevas veinte minutos inmerso en ella, recuerdas que lo que estás viendo es eso, un puto flashback. ¿Y qué pasa cuando vuelves a lo que estaban contando? Pues que la película termina… con un continuará.

Exacto, el año que viene se estrenará la segunda parte. Supongo que otros 40 millones y otro mega póster para promocionarla y quién sabe si otro flashback interminable- Pero otra batalla seguro, me juego lo que queráis, eso no se lo quita nadie.

Nos divertimos viendo la película, pero tampoco pasará nada si no vemos la segunda parte. Porque la historia… pues pse pse, un refrito de muchas cosas que no dejan mucho poso. Epopeya realeza familiar en país exótico, batallas espectaculares 2.0 con ausencia de violencia explícita (muy poca sangre, la verdad) y algunos números musicales que son de lo mejor que tiene la película, por lo bizarro. 

Y fin, cuarenta millones condensados en 135 minutos.