9/5/17


Si el primer día tocó "temática animal", parece que en esta segunda jornada fue el turno de los "cortos artísticos"...que es la forma educada de decir que fueron todas piezas raras, incomprensibles y en muchos casos extremadamente pretenciosas. Vamos, que lo tienen todo para alzarse con la victoria (ya saben que a los jurados esta clase de obras les gustan más que a un tonto dos palotes).

Por si no ha quedado del todo claro: no, prácticamente no me gustó ninguno de los cortos.


Posiblemente el mejor de todos fue "Schirkoa", curiosa parábola sobre una sociedad en la que todo el mundo lleva la cabeza tapada con una bolsa de papel, que resulta fascinante en su planteamiento...hasta que llega el final y te quedas con cara de "¿podría alguien explicarme de qué diablos iba esto?". Y lo siento, pero ya estoy mayorcito para perder el tiempo tratando de buscarle sentido a una historia que no es que sea yo, es que ninguno de los presentes llegó a entenderla.


Mucho más comprensible es "My life I don't want", sobre las vicisitudes de las niñas en la India y cómo la sociedad las aboca a una vida miserable. Como digo es comprensible, bien hecha...y dramática. Muy dramática. Demasiado dramática. Un sota, caballo y rey del dramatismo que te deja pensando "vale, el tema es chungo, pero ya sé lo que me quieres contar desde el primer minuto, podríamos habernos ahorrado el sufrimiento".


El resto... pues tenemos "Caballos muertos", con una de esas alegorías antiguerra tan trilladas que al menos a mí ya no me despiertan ningún tipo de sentimiento (y hacerme llorar en un cine es muy, muy fácil).


O "Poilus", sobre ardillas/soldados en una guerra, en otra de esas historias de "gracias por todo, dame una cuchilla y deja que vaya al baño a cortarme las venas". Parafraseando al Joker de "The dark knight"... "Why so serious?". De verdad que un poquito de alegría y humor tampoco mata a nadie (todo sea dicho, el corto, técnicamente, es excelente. Pero me da tanta pereza...)


Dos piezas que no hay por donde cogerlas son "L horizon de Bere" y "Aur revoir Balthazart", dos cortos que despertaron tan poco interés en mí (el primero una historia sobre cazadores de animales en África con un final a lo David Lynch...si David Lynch sufriera de apoplejía, y el segundo...no tengo ni idea de qué diablos trataba el segundo, con eso lo digo todo) que he decidido resumirlos en el mismo párrafo.


"The rope" cuenta una historia que no puede interesarme menos (el amor entre dos figuras en una cuerda hecha con sal), pero le admito su virtuosismo técnico y que la elaboración es original. Pero es una nueva muestra del triunfo de la forma sobre el contenido.

Menos interesante a todos los niveles es "Cartas", que se pasa de dramática (esa madre cuyo marido la abandona y que sólo encuentra consuelo en su hija) y "Dardo", que...vale, cuando pasados unos pocos días no sólo no estás seguro del título de la pieza, sino que además eres incapaz de recordar de qué iba, es que algo malo pasa. Contigo o con ella, pero déjenme que en este caso use la frase "no soy yo, debes ser tú".

Esto es lo que dio de sí la segunda (y muy decepcionante) jornada. Definitivamente 24 horas atrás me lo pasé mucho, muchísimo, infinitamente mejor.