22/9/16



Ya son 25 los tomos que Planeta Comic ha publicado de una de las series más longevas que aun se pueden encontrar hoy en día, una vez que Kirkman ya anunciara que a su “Invencible” le queda apenas menos de un año de vida en las tiendas o que por ejemplo “Fábulas” ya haya cerrado en su número #150. 
Centenar y medio de números son los que alcanzaremos en este “No hay vuelta atrás" (que recopila el material publicado en los números #145-150 USA) continuando una trama que empezó a remontar el interés del lector más veterano de la serie al final del tomo anterior, tras un par de entregas más bien llanas, aun con la aparición de las nuevas piezas del tablero, los conocidos como “Susurradores”, quienes dieron todo un golpe sobre la mesa al tirar por tierra toda posible amistad o alianza con los grupos de Rick y Maggie al acabar con doce de los miembros de la comunidad. Y es que en el presente tomo se respira venganza e ira en todas y cada una de las páginas que lo componen, mientras se lanza al lector un desafío al preguntarle que es lo que habrías hecho tú ante dicha situación. 
Rick se verá obligado por primera vez a tomar decisiones que primen más el beneficio personal que el bien del colectivo, una comunidad totalmente desmoronada y completamente enemistada ante la situación que se les ha presentado y que me hace recordar una frase que suele utilizar mi mujer: “A los amigos hay que mantenerlos cerca, a los enemigos, aun mas”. 

Ojalá pudiese contaros mas, pero sería entrar en un bucle de spoilers que harían que no se disfrutase la lectura como Kirkman manda. Tan solo espero que el guionista se tome al pie de la letra el título de esta entrega y tenga muy claro que quiere contar y hasta donde quiere contarlo, y que la serie mantenga el interés que se merece sin que aparezcan los fantasmas del sopor que como ya he dicho, estuvieron a punto de hacerse con la serie hace bien poco. Adlard sigue dibujando de forma notable la serie que le catapulto al estrellato, dotando a los personajes de la evolución tanto física como psicológica que evidentemente se tiene que dar en una serie tan larga (recordemos que a Carl le conocimos como niño y ahora es todo un adolescente curtido por mil y una putadas).