3/6/16


El público (y por supuesto me incluyo) por lo general sólo se fija en los resultados. Si algo no le gusta, si una película es mala o un cantante desafina, poco importan los problemas de financiación del film o que el músico pase por un momento personal complicado. Al público lo único que le importa es su satisfacción personal. Y hace bien, qué diablos.

De modo que los que piensen que la programación del Nocturna ha sido floja no van a cambiar de parecer porque yo les diga que no siempre uno consigue las películas que quiere o que apostar por cintas que no se han visto en otros festivales conlleva riesgos.  O los que se quedaron sin una firma de John Landis no van a estar menos molestos si les cuento que al director le estaban esperando para una entrevista en directo cuando se lo llevaron de la rueda de prensa o que el sábado al final firmó a todo el que estaba en el cine. O los que se quejaban de que la clausura del festival coincidía con la final de Champions nunca terminarán de estar de acuerdo con mantener inamovible el programa porque un festival de categoría no se puede plegar a circunstancias externas.


Mi intención no es entrar en polémicas o tratar de demostrar que están equivocados. Sería estúpido y arrogante por mi parte porque, bueno, sus opiniones son tan válidas como las de cualquiera. Pero yo tampoco soy menos que nadie, así que me gustaría aportar mi opinión personal. Si quieren saberla, creo que el Nocturna es un gran festival que, en un año especialmente complicado, supo estar a la altura,

Llevo más de quince años ejerciendo de guionista y diez paseándome por el circuito de festivales. He colaborado, he ayudado, he visto a amigos preparar todo tipo de eventos y he sufrido algunos muy malos. Reitero que mi opinión no es más importante que la de nadie, pero quiero creer que algo he aprendido sobre cómo se trabaja en los festivales y que me he ganado, si no credibilidad, al menos el beneficio de la duda.

No voy a defender al Nocturna comparándolo con otros eventos. En primer lugar porque he estado en otros muchos festivales de primer nivel, con gente sumamente profesional. Y en segundo porque flaco favor le estaría haciendo al Nocturna si entrara en ese juego. Uno tiene que demostrar su valía independientemente de lo que hagan los demás, Si otros festivales lo hacen bien, eso no le quitará valor a los aciertos de éste. Y si hablamos de fallos generalizados, los fallos siempre son fallos y se deben corregir. No me vale el "mal de muchos..."


Con criterios objetivos/subjetivos, pienso sinceramente que la programación del Nocturna estaba bien escogida. ¿Que había películas mediocres? Sí, por supuesto. ¿Qué siempre son más llamativos los títulos conocidos, como podrían ser "Light out" o el "31" de Rob Zombie? Tengo muchas ganas de ver esas películas, no voy a negarlo. ¿Y?

Lo importante no son las películas que faltan, sino las que están. Y creo que casi todos disfrutamos "I had a bloody good time at House Harker" o "Summer Camp". Luego personalmente me fui muy contento de haber visto films como "Night of the living Deb", "Embers" o "The Lesson". Películas de las que no sabía nada y que, si no fuera por este festival, quizás jamás habría visto. Así que ya ven, la ausencia de unas películas da posibilidades a otras. Es una apuesta, a algunos les gustará, a otros no. Yo personalmente compro. Además...¡¡que hubo estreno mundial de "The conjuring 2", por el amor de Dios!! Que eso tiene muchísimo mérito y no lo consigue cualquiera.

(Aparte de que para gustos, colores. Personalmente aborrezco "Polder", pero creo que es interesante que esté en el festival, porque un certamen de estas características debe tener películas de todo tipo, no cortadas por el mismo patrón. Es más, llegó al Nocturna habiendo ganado ya unos cuantos premios y, miren lo que son las cosas, resultó que al jurado le encantó y le dio todos los premios. No comparto su opinión, no me gusta la película. Pero mi criterio no es mejor ni peor que el del jurado, ¿no les parece?)


También creo que es necesario mencionar el gran número de actividades paralelas que desarrolla el festival. Actividades a las que, por cierto, apenas acuden los aficionados. Pero ojo, que no estoy recriminando nada a nadie. La gente es libre de ir o no ir a los sitios, de mostrar interés o no. Sólo lo comentaba porque yo, que voy a todas las que puedo, las disfruto enormemente, y creo que es una pena que la gente se las pierda.

En cualquier caso, vamos a lo importante: ¿no les parece loable que un festival haga ruedas de prensa abiertas a todo el mundo y no sólo para los periodistas? Si alguien quería ver a alguno de los invitados, estar cerca de él, incluso charlar con él, lo tenía fácil. Sí, a John Landis se lo llevaron. Pero el sábado John Landis tenía una mesa puesta en la entrada del cine y firmaba un artículo a todos los aficionados que estaban en la cola, fueran a ver luego la película o no (y a la salida de la proyección siguió firmando a los que se habían quedado sin su dedicatoria). Una organización a la que no le importan los aficionados no monta semejante lío sólo para intentar dejarles contentos.


Pasemos ahora al ámbito humano. Creo (sigo hablando desde mi verdad) que Luis Rosales es un gran director del Nocturna. Porque no sólo hace muy bien su trabajo, sino que se nota que ama el cine. Es una persona extremadamente cercana, con la que siempre se puede entablar una conversación. Le gusta escuchar las opiniones de la gente. Toma nota de las quejas y sugerencias, y además siempre se toma la molestia de razonarte sus decisiones. Que no tienes por qué estar siempre de acuerdo, pero el diálogo siempre es positivo. A veces incluso descubres que puede que seas tú quien estaba equivocado.

Los voluntarios. ¿Alguna vez han visto a alguno poner una mala cara dentro del cine? Siempre sonrientes, siempre serviciales, sin alzar jamás la voz, diciendo las cosas de buenas maneras. Si alguien tiene la tentación de decir eso de "sí, pero no te dejaban sentarte en los sitios que estaban reservados", por favor, piénsenlo dos veces y se darán cuenta de lo ridículo que suena.


Luego, a nivel personal, como periodista acreditado, no tengo más que palabras de agradecimiento para el departamento de prensa. Eva, Sandra, Carla, Raúl, Iván... hicieron un magnífico trabajo. Me dieron todas las facilidades del mundo, me ayudaron con lo que necesitaba y se comportaron como excelentes profesionales. Es cuanto uno puede desear.

¿Que hubo fallos en el Nocturna? Por supuesto. Llegará la edición 50 y seguirá habiéndolos. Así que sí, si nos ponemos manos a la obra seguro que podríamos llenar unos cuantos párrafos con algunas cosas a mejorar. Pero eso no es incompatible con decir que la labor llevada a cabo por todo el equipo fue sobresaliente.

Por supuesto habrá quien piense que estoy escribiendo esto porque soy amigo de la organización. Bueno, no voy a negar que me es imposible ser del todo objetivo, y que siento un cariño especial por el Nocturna. Pero me gustaría puntualizar una cosa: no empecé a venir al festival porque fuera amigo de los organizadores; primero vine y luego es que empecé a cimentar relaciones personales con algunos. En este caso creo que el orden de los factores sí altera el producto, porque si no creyera ciegamente en todo lo que he escrito, se me hace difícil pensar que habría tenido el más mínimo interés en conocer mejor a ninguno de los miembros del equipo.

Sólo puedo decir que si alguna vez decido montar un festival (una de esas locuras que a veces se me pasan por la cabeza) el Nocturna sería mi ejemplo a seguir, así de claro. Si me creen, bien, y si no también. Sé de unas cuantas personas que están hartas de oírme explicar los mismos razonamientos de este larguísimo texto una y otra vez...


De todos modos ya me he metido en un par de fregados similares en el pasado, así que sé cómo va a ir la cosa. Algunos estarán de acuerdo con el artículo y lo aplaudirán. Otros me acusarán de querer quedar bien con la organización a toda costa. Bien, les recuerdo que esto es una columna de opinión, no un foro de debate.

A los que piensan como yo, pues mira, me alegro. Pero sobre todo por el Nocturna, porque significará que están valorando la gran labor que hacen. A título personal no necesito sentirme respaldado. Soy el tipo raro al que la película le gusta igual tanto si el resto del público aplaude como si salen echando pestes. Y en cuanto a los que estén en desacuerdo, respeto profundamente su punto de vista, y les animo a que escriban sus propias impresiones sobre el Festival...pero sin necesidad de rebatir mis argumentos. No tiene ningún sentido convertir esto en una discusión. Cada uno piensa lo que piensa.

Y yo lo que pienso es que tengo ganas de que llegue ya la próxima edición. Que si todo va bien, estaré de regreso un año más, feliz de reencontrarme con algunos amigos, confiando en ver buen cine y dispuesto a pasármelo muy bien. Exactamente como ha sido mi Nocturna 2016.