29/2/16


¿Recuerdan el inicio del clásico de Dickens "Historia de dos ciudades"?: "era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos". No hace falta que se hayan leído la novela (confieso que yo tampoco lo he hecho), pero seguro que la frase les suena. Pues bien, me viene como anillo al dedo para expresar mis sentimientos hacia la 88 Ceremonia de los Oscar que se celebró anoche. Tanto en cuanto a la gala en sí como a los premiados.

Vamos a dividir el artículo en dos partes, para que esto no sea tan largo como la ceremonia. Así que comenzaré hablando de los premiados...lo que me lleva a hacer un pequeño inciso. Los Oscar son un espectáculo que, sinceramente, creo que no deberíamos tomarnos demasiado en serio. Es decir, no hay mayor acto de masoquismo que echar la vista atrás y ver los premiados (y sobre todo los NO premiados, muchas veces los NI SIQUIERA nominados) de ediciones anteriores. 


Es decir, ¿en serio "Blade Runner" fue ignorada por la Academia? ¿Me quieren decir que el mejor papel de Al Pacino ha sido el de "Esencia de Mujer"? ¿Quién se acuerda de "Crash"? En resumen: que no intenten buscarle lógica al asunto. Es un juego. Uno en el que primero nos divierte pensar en las posibles nominadas y luego hacemos nuestras quinielas sobre quién va a ganar. Y ya está, no hay que darle más vueltas.

Dicho esto, y en referencia a los premiados de anoche hay que decir que, sorpresas, lo que se dice sorpresas, no hubo. Leonardo Di Caprio y Brie Larson cumplieron todos los pronósticos y se llevaron las estatuillas a Mejor Actor y Mejor Actriz. Larson, a la que muchos acusan de haber deseado ganar quizás con demasiada intensidad, supo transmitir toda su felicidad cuando subió a recoger el premio. Y en cuanto a Leo... vale, estoy convencido de que ensayó su discurso delante del espejo cientos de veces. Pero sea como sea, lo importante es que lo clavó, dando una lección magistral de porte, clase y saber estar. Sin alargarse demasiado en el speech supo darle las gracias a todo el mundo y, de paso, hacer un alegato medioambiental. Chapó por él.


Alicia Vikander se llevó el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto...que me alegraría más si no hubiera sido un absoluto fraude. Su inclusión en la categoría, digo (su actuación es sobresaliente). Porque la señorita Vikander debería haber estado en la categoría de Actriz principal. Pero claro, con Larson ganándolo todo iba a ser más difícil, así que, en una de esas jugadas habituales en Hollywood, se la "pasó" a una categoría más accesible y, voila, primera estatuilla para la sueca.

Y luego está Actor de Reparto...y por supuesto tenemos que hablar de Stallone. El gran derrotado de la noche, que se une al club de gente como Bill Murray o Michael Keaton (actores a los que todo el mundo quiere, que posiblemente no vuelvan a tener otra ocasión de ganar y que rozaron la estatuilla pero se fueron de vacío).


Siendo sinceros, NO es una sorpresa. No estaba en los Bafta y, más importante, sus propios compañeros de profesión no le habían nominado en los Screen Actor Guild. Siendo objetivos, Mark Rylance (lo mejor con diferencia de "El puente de los espías") siempre fue el enemigo a batir. Lo que pasa es que, conforme pasaban los días, el "efecto nostalgia" y la posibilidad de vivir un momento mítico en la ceremonia (porque lo hubiera sido) fue jugando a favor de Stallone, comenzando un runrún entre los aficionados, que más que pensar que era el justo vencedor, deseaban que ganara. Como fuera. Es decir, si Whoopie Goldberg tiene un Oscar y Roberto Benigni otro, ¿por qué no Sly?

Pero a la hora de la verdad los académicos decidieron que no, que Stallone no merecía el premio. Y en cierto modo lo entiendo. Pero, a pesar de que lo de Rylance me parece para quitarse el sombrero (aunque el ganador del Oscar debería haber sido Jacob Tremblay, su no nominación sí que fue un robo), dentro de diez años poca gente recordará "El puente de los espías", pero casi todos tendrán en la memoria la saga de Rocky. Esto es así.


Del resto de premios, me quedó con algunas reflexiones. Como el hecho de que es evidente que "Mad Max: furia en la carretera" le encantó a los académicos (seis estatuillas lo certifican)...pero luego decidieron que esa no podía ser la mejor película del año. Quizás por ser una cinta de acción (ya saben, sacrilegio), lo que indica que la Academia ha sido, es y siempre será muy conservadora con sus propuestas (es algo similar a lo que podríamos decir de la propia Vikander, cuyo trabajo más elogiado este año ha sido su papel en "Ex Machina"...pero ahí está, con un Oscar por sufrir mucho en "La chica danesa").

Y luego, lo de "Spotlight" y "El renacido" se me escapa por completo. Si "El Renacido" no te gustó tanto como para negarle el premio gordo, ¿entonces para qué diablos le das un segundo Oscar a Iñárritu? (lo que necesitaba, aumentar aún más su ego). Sí, es cierto que, por mal que me caiga el director, la cinta está excelentemente filmada. Pero si lo que querías premiar era la excelencia técnica, ¿por qué no darle entonces el Oscar a George Miller, cuya película es evidente que ha levantado más pasiones? Pues supongo que porque, como decía antes, "Mad Max" es "cine de segunda" y "El Renacido" (que, como un amigo mío la describió, no deja de ser "Terminator en los bosques") tiene esa aureola de peli de calidad.


Pero luego lleva "Spotlight" y se lleva el Oscar a la Mejor Película. ¡La ganadora se va sólo con dos estatuillas! (la última vez que esto pasó fue en 1952 con "El mayor espectáculo del mundo") Y la razón de que esto no suceda casi nunca es que no tiene demasiado sentido (aunque tampoco es un récord, que en los primeros años de los Oscar películas como "Rebelión a bordo" ganó sólo Mejor Película, que ya tiene narices).

La conversación sería más o menos así: "Spotlight es la mejor película del año. Claro, porque tiene al mejor director, ¿no? Qué va. Entonces son los actores, que brillan. Tampoco. ¿Técnicamente es impecable? Qué más quisiera. ¿Pues qué diablos la hace tan especial? Que tiene el mejor guión original del año...aunque, todo sea dicho, se basa en hechos reales, Ah".

Si "Spotlight" es lo mejor del año, debería haberse llevado más estatuillas. Si lo único que te gusta es "que está bien hecha", a lo mejor no se merece el gran premio. Pero bueno, es sólo mi manera de pensar (yo la prefiero a "El renacido". Pero si me hubieran dejado votar, "Mad Max: furia en la carretera" se habría llevado también los premios importantes)


Por lo demás, poco que añadir. Contento por Ennio Morricone (buena banda sonora...y factor compensación jugando a su favor), triste por Stallone (ya lo he dicho) y sorprendido de que, después de la que liaron en el escenario, al final no le dieran el Oscar a Lady Gaga, sino a la espantosa canción de "Spectre" (no es que la otra fuera mucho mejor, pero...). Muchos se quedaron sorprendidos. Pero, después de lo que pasó en los Globos de Oro, yo diría que Di Caprio lo vivió como una doble victoria...

(continuará...con una valoración de la ceremonia en sí)