A comienzos del presente siglo se anunció que Neil Gaiman
escribiría una miniserie para Marvel, lo que hizo que fuesen muchos los que
tirasen muros a pollazos solo de pensar que el creador de la, para mí,
sobrevalorada serie “Sandman” o de esa maravilla que es “Neverwhere” pudiese
trabajar a su antojo con los héroes de Marvel.
Una vez que se anunció dicha serie, compuesta de 8 números, las
previsiones de muchos fueron destrozadas en mil pedazos al ver tanto el título
como las primeras imágenes. Ese 1602 nos situaba muy claramente en la época en
la que se desarrollarían los acontecimientos, y desde el primer momento se
dejaban claras dos cosas por parte del escritor: una, no sería un “What if…?” y
dos, no estaríamos en una realidad paralela, sino que todo lo que leeríamos
sería simplemente el Universo Marvel cuatro siglos atrás, lo que hizo aumentar
la curiosidad, o la desilusión, aún más.
Peter Parquagh y su curiosa atracción por las arañitas... |
Una vez comenzada la lectura, sitúas fácilmente tanto a los
personajes… digamos… re-imaginados, como el contexto histórico en el que se
encuentran. Por ahí tendremos a una reina de Inglaterra falleciendo y siendo
sustituida por su primo Jacobo VI (no es spoiler, es historia), más que nada
porque la trama se empieza desarrollando en Inglaterra pero es en Europa en
general donde se desarrollan los acontecimientos. Del mismo modo nos iremos
encontrando con personajes por todos conocidos pero con una perfecta
interpretación de cómo habrían sido en el siglo XVII. De este modo vemos a un
bardo irlandés ciego (si, todos los irlandeses son pelirrojos…) que no es otro
que Matthew Murdock; a un joven que responde al nombre de Peter Parquagh (Peter
Parker), un joven huérfano que se convierte en ayudante de un muy reconocible y
poco cambiado Nick Furia en relación a su contrapartida actual; o a los “Nacido
Brujos” de Carlos Javier (si, un español se hace hueco en la trama) que como
habréis adivinado no son otros que Xavier y sus X-Men.
Pero son dos personajes que, aunque a priori no les das la
importancia necesaria, serán los encargados de darle la vuelta a la tortilla y
hacer que recuerdes que el Sr. Gaiman afirmaba que todo esto entraba dentro de
la continuidad. La pequeña Virginia Dare y su tan robusto como mudo
guardaespaldas, Rohjaz. La cría de pelo blanco nos sorprenderá a todos cuando
al ser atacada toma la forma de un animal, en clara alusión a Ave Nevada,
miembro del grupo canadiense Alpha Flight. En el caso de Rohjaz, la sorpresa
será aún mayor, ya que no será otro que…
ALERTA DE SPOILER
ALERTA DE SPOILER
ALERTA DE SPOILER
Virginia Dare y su fiel y misterioso guardaespaldas... |
…el mismísimo Steve Rogers, exiliado 400 años en el pasado, lo que confirma la
relación que tiene con el Universo Marvel tradicional que tanto comentaba el
escritor.
En la parte gráfica nos encontramos a un maravilloso Andy
Kubert que prescindió de tintas en este comic y cuyos lápices fueron
directamente coloreados por Richard Isanove, lo que dio un aspecto y un acabado
precioso a toda la obra. No menos espectaculares fueron las portadas a cargo de
Scott McKowen, acorde totalmente con la temática y/o línea histórica en la que
se desarrolla la obra.
8 portadas. 8 obras de arte. |
1602 derivó en tres secuelas más, todas de inferior calidad
e interés, permaneciendo la última de ellas inédita en España, casualmente la
centrada en Peter Parquagh ya convertido en Spiderman y que cuenta con los lápices
de Ramón Rosanas.
Son múltiples las ediciones que Panini ha sacado al
mercado de esta obra desde que se hizo con los derechos de Marvel, ya sean los dos tomos
100% Marvel (formato elegido también para las dos secuelas publicadas); el tomo de la extinta línea Best of Marvel; el más económico y
accesible del Coleccionable Marvel Heroes (9,99 euros, imbatible) o la flamante
edición en Marvel Deluxe.