22/10/15


Qué mejor manera de terminar nuestro repaso a las películas de Sitges 2015 que hacerlo con un film del maestro Takashi Miike, por el que servidor siente auténtica devoción. Como cada año, el genial director estuvo presente en el festival por partida doble (aunque en esta ocasión Sion Sono le ganó, presentando hasta tres trabajos), con "As The God's Will", de la que ya hablamos hace tiempo, cuando le dedicamos una retrospectiva a Miike, y este "Yakuza Apocalypse" que ahora nos ocupa.

Ver una película de Miike es como jugar a la ruleta rusa, nunca sabes lo que te vas a encontrar. Por fortuna este año nos ha tocado ración doble del Miike más gamberro y rompedor, que particularmente es el que más me gusta. "Yakuza Apocalypse" es un festín de locuras, situaciones imposibles, escenas delirantes y "what the fuck's" pronunciados con una sonrisa. Yo me lo pasé como un enano.


También tengo que advertir que es una película difícil. Quiero decir, es maravillosa para todos los que seguimos la trayectoria del director y ya estamos acostumbrados a sus locuras, sus idas de olla, sus estructuras poco convencionales, su ligera misoginia (los papeles de mujeres destacados en  su cine se pueden contar con los dedos de una mano) y todo lo que significa asistir a una película de Miike. Dicho de otro modo, si eres de los que ven todos sus films, tanto los buenos como los regulares y hasta los malos, créeme, éste entra en la primera categoría.

Pero si tampoco eres tan fan suyo, si ni siquiera sabes cómo se las gasta y simplemente has entrado en el cine a ver qué tal...pues mira, hay dos opciones. Saldrán flipando en colores y queriendo ver más películas suyas, o te cogerás un rebote de tres pares de narices porque pensarás que te han tomado el pelo (o que no es para tanto). Es tan sencillo como ser parte del club o no serlo.


Para los que sí lo son, atentos, que la trama no tiene desperdicio. Porque Miike regresa a su tradicional mundo de los yakuzas, con su camaradería, su sentido del honor, sus luchas internas pero siempre velando por los intereses de la gente del pueblo... Un argumento que ya ha usado muchas veces con anterioridad.

Aunque claro, la "pequeña" diferencia es que en esta ocasión el jefe yakuza resulta que es un vampiro. Y no uno cualquiera, sino uno que sólo se nutre de la sangre (de baja calidad) de los otros líderes yakuzas, ya que no quiere hacer daño a la población civil. Pero cuando unos misteriosos seres le atacan, ante su negativa a unirse a su hermandad y abandonar sus obligaciones como yakuza, será uno de sus guardaespaldas, que siente auténtica devoción por su jefe, quien tendrá que hacerse cargo de la situación... tras haber sido previamente convertido en vampiro.


Y claro, como lo de ser un no-muerto no viene con un libro de instrucciones, el pobre hombre empieza liándola parda, al zamparse a todo el que se le pone delante, creando sin quererlo un auténtico ejército de vampiros. Lo que en última instancia tampoco le vendrá nada mal, sobre todo cuando tenga que hacer frente a una especie de hombre tucán, un chino que reparte hostias como panes...y al hombre rana.

Sí. Hay un hombre rana. Un ser envuelto en una especie de disfraz de rana gigante, pero que cuando se quita el disfraz...olvídenlo, tienen que verlo por ustedes mismos. Es recordarlo y tener ganas de empezar a aplaudir de nuevo.


"Yakuza apocalypse" es un desfase que enfrenta a vampiros con yakuzas con seres mitológicos. Un desparrame, un excelente divertimento, una broma que está claro que no todo el mundo pillará. Pero los que lo hemos hecho sólo podemos hacer una reverencia a Miike y preguntarnos con qué dos películas nos sorprenderá el año que viene.

Por mi parte, serán las dos primeras entradas que compre. Eso lo tengo claro.