17/10/15


Una edición tan interesante y con tan buenas propuestas como ha sido Sitges 2015 no se merecía una película de clausura como "Into the forest". Podríamos debatir mucho sobre los motivos para que la cinta no funcione. Su ritmo lento, su historia intimista (quizás no la mejor elección para un fin de fiesta) o incluso habrá, porque siempre los hay, quien diga que mi animadversión hacia el título tiene que ver con que esté dirigido por una mujer, Patricia Rozema. Iba a añadir algo al respecto, pero en serio, no merece la pena.

Si "Into the forest" no funciona es, simple y llanamente, porque es una película muy aburrida.

Obviamente habrá quien adore la película (aunque no el público de la sala con el que compartí proyección, eso os lo aseguro). Pero, como siempre digo, las críticas, al menos en esta web, siempre tienen un carácter personal. Sólo puedo hablar de mis gustos y mis impresiones. Y he de decir que no hay nada en la cinta que me parezca digno de mención (más allá del trabajo de las actrices, Ellen Page y Evan Rachel Wood, que están bastante bien, y de Callum Keith Rennie, de lejos lo mejor de la película).


Presten atención a la palabra "típica", porque la van a leer bastante en el siguiente párrafo. "Into the forest" es la típica película de civilización que se viene abajo de la noche a la mañana, con típicos personajes que tienen que descubrir cómo sobrevivir. Como es típico, todo lo que puede salir mal sale mal (es como "La casa de la pradera", pero a lo bestia; ni un puñetero golpe de suerte) y cuando aparece un hombre en la casa del bosque en la que viven las dos hermanas protagonistas, termina resultando ser una amenaza. Lo típico.

No es ni siquiera que esté mal hecha (que no lo está) o que no sea interesante, que quizás pueda serlo para alguien (no para mí, pero para gustos...). Es sencillamente la sensación de que no me está interesando nada de lo que me cuentan. Que, para esto, me quedo con "Z de Zacharías", que vi recientemente (tema similar) y que, sin ser una obra maestra, logró captar más mi atención.


Y como les digo que esto va de gustos personales y feeling (es así, no lo escondo y no voy a pedir perdón por ello), luego llegó la directora a la rueda de prensa y terminó de encharcarlo todo.Que no dudo que seguro que Patricia Rozema es una señora encantadora, pero en la sala, defendiendo la película, se cubrió de gloria.

Comenzó diciendo que lo que le atrajo del proyecto es que le parecía un tema novedoso que nunca se había hecho en el cine (señora, con todo mi respecto, quizás debería ver más películas...). Luego, sin que nadie se lo preguntara, pasó a hablar del "tono póetico" de la cinta. A ver, servidor es un enamorado del arte, y sin duda me encanta encontrarme con imágenes fascinantes cuando voy al cine. Pero cuando un director empieza a hablar de"tono poético", mi primera (y acertada) reacción es echar a correr en dirección contraria. Porque en esas conversaciones la palabra "pedantería" nunca se dice, pero sobrevuela en el ambiente,


Pero lo peor vino (y esto es un gran spoiler de la película. Ya conocen las reglas, si no quieren saberlo, sáltense este párrafo y el siguiente) cuando la directora habló del momento de la película en el que el personaje de Rachel Wood queda embarazada a causa de una violación y decide tener el niño (algo que me parece perfecto). Pues bien, un periodista le preguntó qué le parecía la reacción de parte del público, que había silbado ante la decisión de la protagonista (reacción igualmente respetable). Y Rozema, en vez de decir que eso estaba en la novela original en la que se basa la peli, que le parecía un camino interesante para el personaje o, qué diablos, que ella es pro-vida y quería plasmar sus ideas en pantalla (que tiene todo el derecho del mundo), no, de repente saltó con que "es que abortar no es tan fácil como ustedes se creen".

Recapitulemos. Las dos hermanas, a lo largo de la película, y con ayuda de libros, aprenden a cazar. A despellejar a un jabalí y cocinarlo apropiadamente. A diferenciar frutos y hojas comestibles. A sobrevivir sin electricidad. A llevar a buen término un embarazo en medio del bosque. Pero, según la directora, eso son menudencias, porque lo verdaderamente difícil habría sido averiguar cómo practicar un aborto. Ya. claro, vale, aceptamos pulpo...


Obviamente si Rozema vuelve a hacer otra peli y me parece una maravilla, lo proclamaré a los cuatro vientos con gran alegría. Pero eso no quita para que "Into the forest" me haya parecido una gran decepción. Y si encima tenemos en cuenta que la directoria no me dio buen feeling y que Ellen Page es una gran actriz, pero cuando la conocí este año en San Sebastián me cayó muy mal, miedo me da de coincidir un día con Evan Rachel Wood, a ver si va a ser cierto que no hay dos sin tres...